Luke Edwards, conocido periodista del Newcastle, ha escrito un artículo de opinión en el que analiza los próximos movimientos del Newcastle United.

Tras un resultado tan desastroso en una gran final de Copa por primera vez desde 1999, el Newcastle está a punto de anunciar una serie de acuerdos de patrocinio que le ayudarán en la ventana de verano a reforzar su posición.

Lo que hay que hacer es dar más «herramientas» para mejorar al Newcastle. Su plantilla necesita ser mejorada, una reflexión fundamental provocada por el frío final de otra derrota en Wembley.

Jugadores de la talla de Dan Burn, Fabian Schar, Sean Longstaff, Miguel Almirón e incluso el desdibujado Callum Wilson, todos ellos condecorados jugadores del Newcastle, parecen haberse desvanecido de algún modo para un Newcastle con grandes ambiciones.

De aquí a mayo, todos luchan por su futuro, tanto en el club como en sus respectivos puestos de titular.

Incluso alguien como St. Maxime puede ser visto como un lujo que ya no merece la pena tener. El Newcastle pretende fichar en verano un central, un lateral izquierdo, un centrocampista y hasta dos delanteros.

Pase lo que pase ahora, una cosa es segura: no pasarán otros 24 años antes de que el Newcastle llegue a otra final de Copa. Esto no es el final, es todavía el principio, una muestra de lo bueno que está por venir, sólo un amargo intento.

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